Inseguridad, culpa, autoestima y canon de belleza

Hoy quiero compartir con vosotr@s un comentario que he enviado al lindo Blog 

Yo la más gorda de todas

(Como ser XL en un mundo small)

(el título es un enlace al mismo blog), y que todavía debe ser aprobado. Antes quiero aclarar que se trata de unos de los mejores blogs que conozco y que estimo mucho su autora. Si hubiesen más personas como ella los cánones de belleza no serían tan estrictos e innaturales, serían un arco iris de bellas diversidades. Todo depende de la interpretación del ser humano, el mundo es como queremos interiorizarlo y vivirlo. Si casi tod@s queremos seguir los mismos patrones, a mi parecer es porque nos sentimos más cómod@s siguiendo unas pautas preestablecidas en lugar de trazar un camino nuevo con nuestros pasos, el camino que nuestra personalidad única pudiera crear.

Del blog o desde la web - poniendo su título en el buscador - extraigo estas fotos, que quieren ser una nota diferente en el contexto de la representación clásica de la mujer occidental (entendiendo este término como cultura, no como punto geográfico). 

A pesar de concordar con los propósitos del blog (de fomentar la autoestima entre las personas con sobrepeso porque salgan y se sientan felices desde ya, y sólo no cuando hayan adelgazado), he expresado mi opinión contraria con respecto a las raíces de los muchos sentimientos de exclusión que causan sufrimiento entre varias categorías de personas. 

Las categorías excluidas por la sociedad en la que viven son muchas, son diferentes en cada cultura y sufren tanto restricciones objetivas, materiales (por ejemplo la escasez de oferta de vestimenta de todas las tallas), como acoso emocional. Indudablemente estos factores causan sufrimiento, pero yo creo que es importante recordar que los patrones culturales son establecidos por las personas y cambiarlos o (mejor aún) crear un mundo básicamente más flexible y abierto depende de tod@s norotr@s. En primera persona.

En el post 'La certeza de la belleza', del mismo blog, encontramos estupendas aclaraciones como esta: 

<< Cuando una mujer verdaderamente se ama, fluye, transita la vida con seguridad, no pide ser aceptada, tiene la claridad suficiente para saber que si es feliz consigo misma, no tiene necesidad de habitar posturas o comportamientos que no la definen. Una mujer que se respeta, genera y contagia lo mismo, se siente digna por quién y cómo es, no necesita de un cuerpo con medidas impuestas por otro. Cree en sí misma y por carácter transitivo el mundo cree en ella. >>

Pero luego sigue este párrafo, que se aleja de mi manera de pensar:

<< A qué corresponde que gran parte del género femenino se encuentre en esta profunda insatisfacción, yo creo que se debe a la fuerza de una sociedad y un mercado que nos ha vendido la fórmula del éxito como necesaria para ser “alguien” en nuestras comunidades, léase reconocido, no tanto por el valor de lo que se hace sino por la espectacularización de lo que se muestra, y en este punto el cuerpo cobra un valor fundamental, pues parece que en la medida que se cuenta con determinadas proporciones físicas se está más apto a toda una serie de bienaventuranzas sociales, por ejemplo el ser considerada linda. Lo más frenético es que este sistema está tan enfermo que ni aún las mujeres que cumplen con determinados requisitos y encajan en el molde perfecto logran el placebo de la felicidad, viven perseguidas por fantasmas, jamás se contentan con lo que son y lo que tienen y la insatisfacción se vuelve patología. >>

Respondo, entonces, con mi comentario:

- No  lo creo. En mi opinión la causa es interior, hay un vacío interior en la mayoría de las personas que hace que corran a buscar algo para sentirse bien, algo exterior como la aprobación de los demás, productos anunciados por TV o hasta drogas. Pero el bienestar dura muy poco, y se necesita luego otra dosis de lo mismo. Por eso la chica insegura que busca la perfección estética, si no cura su sentimiento de inseguridad nunca se sentirá satisfecha con su imagen. Lo mismo les sucede a los inseguros que buscan realización profesional pero siguen un curso de estudios tras otro y nunca se lanzan en el mundo del trabajo porque creen que los títulos conseguidos no son suficientes, mientras otros individuos consiguen el éxito profesional desde jovencitos. Para salir de esquemas de esclavitud, a mi parecer, hay que enterarse de que los factores externos que culpamos (la sociedad, las modas, la educación, los mensajes subliminales, la publicidad más chillona o un pusher escondido en el rincón más oscuro de la ciudad) no son más que agentes neutros que nuestra hambre de satisfacción transforma en gigantes. Al no tener clientes, estos agentes externos literalmente desaparecerían. Ahora bien, como no conocemos el origen de la vida, como ni la ciencia ni otras disciplinas han podido todavía aclarar si nace antes el huevo o la gallina, es inútil fantasear sobre el cierre de ciertos programas de TV o medidas similares como solución. Estas pueden ser medidas justas, éticas, pero lo más probable es que la gente que siente un vacío interior, al no tener estas escusas se apegue a otro esquema de dependencia y no salga de la misma, que simplemente cambie una droga por otra como sucede a quien come más después de haber dejado de fumar. Su inseguridad y debilidad se manifestaría de otra forma, al no estar obsesionad@s con un canon de belleza se obsesionarían con otro asunto. 

Tampoco estoy segura, como madre, 

de que la autoestima se pueda enseñar. 

Yo he trabajado mucho sobre mí y me siento muy bien, de modo que a mis hijos (2 niños y una niña entre los 5 y los 10 años de edad) doy un ejemplo que creo positivo, pero noto que ellos 3 tienen 3 diferentes ideas acerca de la vida, cada uno interpreta la realidad de su forma y evidentemente deberán continuar su camino personal, un camino que quizás no hayan empezado en esta vida sino en otras dimensiones del universo que no conozco o no recuerdo. Lo único que puedo decirles es que la clave del éxito en cada asunto de la vida es utilizar nuestro propio poder de cambio y analizar nuestras causas internas. Vencer nuestros miedos y amar este camino de aprendizaje que es la vida misma. La alegría producida por los resultados es transitoria, ya que siempre aparecen nuevas inquietudes que nos ayudan a movernos hacia nuevos logros materiales o emocionales que serán las manifestaciones de nuestro crecimiento interior, pero el amor puede convertirse en un hábito básico. Si queremos.

OS INVITO A SEGUIR DEBATIENDO  :-)

.